Para bebés y niños pequeños es importante elegir un probiótico que se adapte a los principales problemas que dañan significativamente su sistema digestivo, a continuación te mencionamos algunos de los factores más recurrentes que padecen:
Estreñimiento: El uso de probióticos puede quitar el estreñimiento como resultado de una pobre flora intestinal, y estimulan los movimientos del intestino.
Los trastornos en el intestino, así como cólicos intestinales y dolores de estómago: Los probióticos mejoran el sistema de defensa, dando lugar a menos síntomas de dolor. También apoya la digestión, llevando a menos síntomas gastrointestinales.
Diarrea: La administración de suplementos de probióticos favorece la flora intestinal. Además, la diarrea causada por el rotavirus (un virus que causa la enfermedad y diarrea, especialmente en niños pequeños) pueden ser reducidos a través de los probióticos.
Recuerda que alergias, hipersensibilidad a los alimentos, asma y otros numerosos trastornos en el sistema inmunológico están estrechamente relacionadas con el desarrollo de la flora intestinal, por lo tanto, el consumo de probióticos refuerza el sistema inmunológico.
